Problemas de Autocontrol de la ira
Consiste en la aparición de episodios en los que existe una gran dificultad para controlar los impulsos agresivos o destructivos. La persona es consciente de dicha dificultad pero no sabe cómo pararlo y ha hecho intentos fallidos de autocontrol.
Durante los episodios agresivos puede aparecer violencia física, verbal o destrucción de objetos o propiedades, que no haría en estados emocionales tranquilos.
El grado de agresividad es desproporcionado con respecto a la provocación o a la intensidad del estímulo que ha precipitado la respuesta de ira.
La dificultad para controlar la ira puede causar a la persona:
- Un incremento de las propias frustraciones.
- Una dificultad para solucionar los problemas.
- Una imagen personal muy pobre de uno mismo.
- Problemas de salud debido al aumento de la presión arterial y al desgaste físico.
- Problemas de maltrato físico y psicológico.
- Sentimientos de culpa.
- Problemas de relación.
- Sentimientos de soledad.